Décimo noveno post del año o SPM

El Lobo dice...
Queridas y cuerdas lectoras, amables y equilibrados lectores:
Quienes me han seguido los últimos meses, saben que por estas fechas un suceso horrendo me depara. SPM, SM y SPM.
Ásí es, mi Jefa está a punto de cumplir su ciclo lunar, se pone de un sangrón que para qué les cuento, desde antier iniciaron los roces, puyas y habladas de su parte por supuesto, pero ayer me agarró en mis cinco minutos y ¡ñacas! Nos declaramos la guerra, a veces uno aguanta vara, uno es empático con las visicitudes femeninas, pero todo llega a su límite.
Hoy simplemente no nos hablamos o lo hacemos lo meramente indispensable, lo cual se reduce a cuestiones laborales. Me choca que me digan qué hacer o que cuando le estoy mostrando con pruebas que lo que está diciendo es una pendejada, no lo tome en consideración. En fin, en unos cuantos días cambiará el panorama.

Les platico que ayer platiqué con mis vecinos, no los de arriba, si no con unos muchachos originarios de San Cristobal de las Casas, que están cursando sus estudios superiores en la Universidad Salazar de esta Ciudad. Digamos que los tomé por asalto, pues llegaron temprano a echarse unas chelas, decidí invitarlos a mi próxima presentación.
Muy amables me ofrecieron una ampolletita de corona, la cual como dictan las reglas básicas de la etiqueta, rechacé, pero ante la insistencia y recordándo nuevamente las mencionadas reglas básicas, terminé por aceptar.
Les leí dos cuentos, "Tláhuac" y "El cartel", de los cuales la reacción no se hizo esperar, me ofrecieron otras cuatro chelitas. De esa manera pude comprobar que mi trabajo les gustó y que era bienvenido, platicamos de la Ciudad de México, de la inseguridad, de política, contamos chistes de abogados y en resumen la pasamos muy bien. Es más, hasta amarré un jersey del equipo de futból americano "Lobos", y eso sí que es coincidencia.
Fue una noche bastante rica, buena charla nuevos amigos y estrechez de lazos vecinales, la cual fué prácticamente una réplica nocturan de las charlas que muy amablemente mi amiga Dianita Cometa, me invitó a darles a sus pupilos de segundo semestre de prepa del Tec de Monterrey Campus Chiapas.
Dos grupos contentos de salir del salón de clases y aprovechar para retozar en los jardines de la institución, niñas guapas e inquisitivas, muchachos a la moda y perceptivos; la verdad me encantó compartir con ellos esa plática, pues también leí algunos cuentos y respondí a sus preguntas.
Muchas veces nos hacemos a la idea de un público difícil, de niños y niñas mimados, pero no fue así. Me encantó encontrar a muchachas y muchachos curiosos, respetuosos y con muchas preguntas por hacer, me entusiasmó saber que muchos se dedican a escribir y a leer en sus ratos de ocio, me enterneció su manera de responder a la lectura de los cuentos. Dos grupos maravillosos y a los cuales espero volver a ver y platicar con ellos.

Eso me lleva a cuestionarme ¿además de la publicidad de mi obra y la aceptación por parte de una nueva generación, se puede pedir más?

Aullidos de finde para ustedes.

P.S. Espero soñar y soñar y soñar.