Nonagésimo sexto post del año o "De Foam a entristecer al payaso"

El Lobo dice...
Queridas Lectoras, amables Lectores:
Con retrasos, altibajos y mucho que contar inicio la semana, una semana más de subempleo y entrega de currículums, de pasar a ser un elemento más de la RE.NA.TA. (Reserva Nacional de Talentos) y buscar la manera de alimentar a mi Lobito.
Las cosas están mal, pero no del todo mal.
Acudí al Teatro "El galeón" y presencié un concierto de FOAM, proyecto de Gerardo Pellicer y apoyado por un excelente grupo de colaboradores, (entre el crew se cuenta a un Zombie Cachetón). El escuchar algo tan diferente, es grato, pero lo es más cuando compartes la experiencia con la sorpresa de encontrarte a una persona inesperada en el teatro. Junny, con quien compartí unas chelas y una fiesta de cumpleaños sui generis en Chiapas.
En estos días también leí "Cuentos para entristecer al payaso" de mi hermanita de letras Sonia Silva-Rosas y la cual està dedicada a su padre, a sus hijos y a este Lobo, quien además de sentirse honrado, se emocionó hasta las lágrimas. Es una antología oscura que retrata lo más terrible del género humano. Una obra excelente, con algunos detalles de humor muy negro. Me gustó hermanita, es muy rudo, pero muy bello en ese espejo maldito en el cual nos reflejas ¡FELICIDADES!
Mientras la vidorria transcurre inexorable y eso es maravilloso, te hace tomar parte o quedarte en la banqueta.
He estado soñando con ex-novias, con mujeres atractivamente casadas, con La Musa y con Brujas malvadas del oeste, he escrito un carajo y las cosas van fluyendo después de un horrendo vacío.
He leído bastante y lo mejor de todo, me he divertido de lo lindo. Aunque aqui bien se aplica las siguientes preguntas.
¿Y éste cabrón de qué se ríe? Me rio de lo que sucede, lo disfruto.Hasta esta etapa sé que va a pasar y he decidido hacer concha. Mejor me ocupo en lugar de preocuparme.
Por ahí se quedaron unos proyectos interesantes, pero que no me dan de comer, otros que cabría la posibilidad de que fueran materia de sustento, pero no están claros todavía.
Tuve miedo, ganas de darme un tiro o arrojarme a las vías del metro y arruinarle su mañana o tarde a los cientos de usuarios que le mentarían la madre a una masa sanguinolenta. Estuve a punto de enlistarme a la Legión Extranjera, de volver a autoexiliarme y esperar acobardado a que pasara la tormenta.
¿Qué hizo el Lobo entonces? Aullé, aullé tan fuerte como pude, y poco a poco me empecé a escuchar, me dije que ya puedo solo, que nomás requería un empujoncito, que la vida va pasando y que en unos días dará otro vuelco más. La vida es así y estoy listo para morir nuevamente y renacer en una nueva vida, la cual será completamente diferente.
¿Qué me llevo de esta vida de bohemia y arte? Ni idea, aunque me quedo en su recuerdo como el único Lobo lampiño que conocerán.
¿Existe la posibilidad de renacer también como Escritor? (a pesar de la mala opinión de algunos anónimos y uno que otro conocido detractor) Muchas, pues buscaré la manera de madurar lo que he dejado de hacer; buscando el secreto de los múltiples orgasmos literarios y hacer.
¿Es esto una despedida? ¡NI MADRES! Aqui tienen Lobo para rato.

Aullidos para ustedes.