El Lobo dice...
Adoradas lectoras, amabilísimos lectores. Sean nuevamente bienvenidos a las andanzas lobunas de éste licántropo adorador de Selene.
Hoy deseo compartirles a ustedes, una preocupación que me ha dado vueltas a la cabeza durante la última semana. Se trata de la llamada Ciberadicción.
La mayoría de nosotros, pasamos gran parte del día utilizando una computadora, mandamos correos basura, chistes, cadenas, oraciones, presentaciones, chistes, noticias, chistes, y uno que otro correo de trabajo.
Hasta ahí, la cosa es relativamente normal. Pero, ¿qué hacemos al llegar a casa? saludamos de mala gana porque estamos hartos del trabajo; agotados de estar en la oficina; le damos un beso a nuestros críos, quienes seguramente estan viendo la tele o tratando de terminar su tarea, otro beso desganado a nuestra pareja, o dispareja según el caso, y enseguida encendemos la "pc" o el "lap top" para empezar a revisar nuestro correo, y enviar correos basura, chistes, cadenas, oraciones, presentaciones, chistes, noticias, chistes, y ni un correo del trabajo, porque estamos en casa descansando.
Eso sin contar con una cuenta en Hi5, Tagged, Facebook, Fantasias Motel, Adultfinder, pornogranies, etcétera. Si la tenemos, la debemos mantener actualizada y al día. O de plano el messenger. Incluso buscamos emuladores para conectarnos en el trabajo mediante "diablitos".
Y por supuesto, el Top ten, la madre o el padre de todas las horas nalga que pasamos en internet.
Aquí incluso se incluirán datos a ojo de buen cubero, pues los sitios y actividades varían entre los cibernautas:
Mensajeros instantáneos (yahoo, messenger, etc.).
Youtube.
Bloggeando (redactando o leyendo a los cuates).
Páginas porno.
Googleando (incluyendo las páginas porno).
Mercado libre y sitios afines.
Hi5 y páginas de red social.
Jugando en línea.
Páginas de chismes.
Periódicos y revistas en línea.
Claro que la lista puede variar de cibernauta a cibernauta como lo mencioné antes.
Y como hoy es viernes de balcón, todo esto me lleva a decirles lo siguiente:
Me llamo Juan de Lobos y soy ciberadicto.
(en este momento dicen o escriben todos ustedes, "HOLA JUAN DE LOBOS").
¿cómo podemos notar si hemos sido presa de ésta adicción?:
En nuestros números de emergencia, incluímos el de los cibercafés de la colonia.
Ansiamos desconectarnos en la oficina, para salir corriendo a casa y conectarnos nuevamente.
Te deprimes si los contadores de tus páginas personales o blogs no aumentan.
Has conocido más gente en internet que en tu vida real.
Deseas agregar tu nickname a tu acta de nacimiento.
Te conocen más por tu nickname que por tu nombre de pila (de ahí la decisión anterior)
Usas palabras como "ordenador", "vos", "geek" en tus charlas habituales.
Entiendes un lenguaje extraño creado con símbolos.
Ya no sabes como se escribe "que", "sé", "cabrón" o "kiosko" porque tu lenguaje escrito se ha convertido en fonético.
Y por supuesto los síntomas más serios:
Duermes poco y mal, por estar chateando hasta las tantas de la madrugada.
Tus relaciones sexuales se estan convirtiendo en "sano y seguro" cibersex.
Tu postura es encorvada y te duele la espalda o los hombros todo el tiempo.
Te arden los ojos.
Hace mucho no ves unos senos de verdad abarcados por tus manos, (en el caso de los hombres y amigas les).
No te imaginaste que los hombres fuésemos tan exhibicionistas, y a cada invitación de webcam que te hacen en messenger, estás 80% segura que te mostrarán un falo. Así que has visto más penes que las últimas tres generaciones de mujeres de tu familia, (en el caso femenino).
Comes poco y mal para mantenerte en línea, (no en tu peso, si no frente a tu ordenador).
Piensas todo el día en lo que escribirás en tu post.
Sé que no soy el primero que ha leído o elaborado un diagnóstico como el que les regalo en líneas superiores; también sé que somos muchos los que padecemos de esta adicción.
A veces lo tomamos a broma, pero esto es serio. No daré, ni los aburriré con estadísticas, ni citaré estudios de la Universidad de Pijijilco para fortalecer mis palabras. Lo único que puedo aportar es que no todo es negativo, que podemos tener una vida "fuera de la matrix" como algún día me dijo mi carnal Hugo. Y sobre todo, no olvidarnos que la computadora es una herramienta y que es posible superar cualquier cosa "un día a la vez".
Aullidos y saludos para ustedes.
AAAAAAAaaaaauuuúuuuuuuuuuuuu.
(me encanta como lo lee mi cibersecretaria je je je).
Adoradas lectoras, amabilísimos lectores. Sean nuevamente bienvenidos a las andanzas lobunas de éste licántropo adorador de Selene.
Hoy deseo compartirles a ustedes, una preocupación que me ha dado vueltas a la cabeza durante la última semana. Se trata de la llamada Ciberadicción.
La mayoría de nosotros, pasamos gran parte del día utilizando una computadora, mandamos correos basura, chistes, cadenas, oraciones, presentaciones, chistes, noticias, chistes, y uno que otro correo de trabajo.
Hasta ahí, la cosa es relativamente normal. Pero, ¿qué hacemos al llegar a casa? saludamos de mala gana porque estamos hartos del trabajo; agotados de estar en la oficina; le damos un beso a nuestros críos, quienes seguramente estan viendo la tele o tratando de terminar su tarea, otro beso desganado a nuestra pareja, o dispareja según el caso, y enseguida encendemos la "pc" o el "lap top" para empezar a revisar nuestro correo, y enviar correos basura, chistes, cadenas, oraciones, presentaciones, chistes, noticias, chistes, y ni un correo del trabajo, porque estamos en casa descansando.
Eso sin contar con una cuenta en Hi5, Tagged, Facebook, Fantasias Motel, Adultfinder, pornogranies, etcétera. Si la tenemos, la debemos mantener actualizada y al día. O de plano el messenger. Incluso buscamos emuladores para conectarnos en el trabajo mediante "diablitos".
Y por supuesto, el Top ten, la madre o el padre de todas las horas nalga que pasamos en internet.
Aquí incluso se incluirán datos a ojo de buen cubero, pues los sitios y actividades varían entre los cibernautas:
Mensajeros instantáneos (yahoo, messenger, etc.).
Youtube.
Bloggeando (redactando o leyendo a los cuates).
Páginas porno.
Googleando (incluyendo las páginas porno).
Mercado libre y sitios afines.
Hi5 y páginas de red social.
Jugando en línea.
Páginas de chismes.
Periódicos y revistas en línea.
Claro que la lista puede variar de cibernauta a cibernauta como lo mencioné antes.
Y como hoy es viernes de balcón, todo esto me lleva a decirles lo siguiente:
Me llamo Juan de Lobos y soy ciberadicto.
(en este momento dicen o escriben todos ustedes, "HOLA JUAN DE LOBOS").
¿cómo podemos notar si hemos sido presa de ésta adicción?:
En nuestros números de emergencia, incluímos el de los cibercafés de la colonia.
Ansiamos desconectarnos en la oficina, para salir corriendo a casa y conectarnos nuevamente.
Te deprimes si los contadores de tus páginas personales o blogs no aumentan.
Has conocido más gente en internet que en tu vida real.
Deseas agregar tu nickname a tu acta de nacimiento.
Te conocen más por tu nickname que por tu nombre de pila (de ahí la decisión anterior)
Usas palabras como "ordenador", "vos", "geek" en tus charlas habituales.
Entiendes un lenguaje extraño creado con símbolos.
Ya no sabes como se escribe "que", "sé", "cabrón" o "kiosko" porque tu lenguaje escrito se ha convertido en fonético.
Y por supuesto los síntomas más serios:
Duermes poco y mal, por estar chateando hasta las tantas de la madrugada.
Tus relaciones sexuales se estan convirtiendo en "sano y seguro" cibersex.
Tu postura es encorvada y te duele la espalda o los hombros todo el tiempo.
Te arden los ojos.
Hace mucho no ves unos senos de verdad abarcados por tus manos, (en el caso de los hombres y amigas les).
No te imaginaste que los hombres fuésemos tan exhibicionistas, y a cada invitación de webcam que te hacen en messenger, estás 80% segura que te mostrarán un falo. Así que has visto más penes que las últimas tres generaciones de mujeres de tu familia, (en el caso femenino).
Comes poco y mal para mantenerte en línea, (no en tu peso, si no frente a tu ordenador).
Piensas todo el día en lo que escribirás en tu post.
Sé que no soy el primero que ha leído o elaborado un diagnóstico como el que les regalo en líneas superiores; también sé que somos muchos los que padecemos de esta adicción.
A veces lo tomamos a broma, pero esto es serio. No daré, ni los aburriré con estadísticas, ni citaré estudios de la Universidad de Pijijilco para fortalecer mis palabras. Lo único que puedo aportar es que no todo es negativo, que podemos tener una vida "fuera de la matrix" como algún día me dijo mi carnal Hugo. Y sobre todo, no olvidarnos que la computadora es una herramienta y que es posible superar cualquier cosa "un día a la vez".
Aullidos y saludos para ustedes.
AAAAAAAaaaaauuuúuuuuuuuuuuuu.
(me encanta como lo lee mi cibersecretaria je je je).